Histórica
003
Abril de 2003
Por Carlos E. Jalife Villalón
12 Cierres Rompecorazones
en Carreras de Autos
En las carreras
de autos, nada está escrito hasta que cae la bandera
a cuadros. Hay victorias famosas pero también hay
casi victorias que han sido más famosas por la emotividad
y el dominio que no se traducen en la corona de laureles
y el trofeo, como le sucedió hace días en
Long Beach a Michel Jourdain L. en una carrera que dominó
podríamos decir desde los entrenamientos del sábado,
y en la cual terminó siendo clasificado en el sitio
15 con apenas un par de puntos que mostrar para su apabullante
demostración que nos dice que está listo para
pelear el campeonato con quien sea. Si los 12 primeros sitios
dan puntos, veamos algunos de los 12 momentos más
dramáticos de monoplazas de todos los tiempos:
1. 1964, GP de México. Jim Clark en un Lotus-Climax
dominó la carrera durante 64 vueltas y en la 65 y
última tronó su motor que iba perdiendo aceite
desde algunas vueltas antes. Con Clark eliminado –si
ganaba era campeón del mundo ya que era el final
de la temporada- Dan Gurney tomó la victoria para
el equipo Brabham pero el equipo Ferrari saltó la
barrera en masa para advertir a Lorenzo Bandini que dejara
pasar a su coequipero John Surtees, el cual acabó
en segundo sitio y con el campeonato del mundo en la bolsa
(esas eran órdenes de equipo). Clark fue felicitado
en los fosos por su gran carrera y declarado vencedor moral,
pero nunca alcanzó el tricampeonato.
2. 1991, GP de Canadá: Nigel Mansell dominó
en su Williams-Renault la carrera en Montreal desde la arrancada,
poniendo presión a McLaren y Senna que habían
sido los mejores al principio del campeonato. Mansell estaba
en la última vuelta saludando a la gente cuando dejó
caer las revoluciones del motor demasiado y al tratar de
buscar una velocidad más baja puso la caja en neutral
con lo que la presión hidroneumática de la
caja de velocidades se quedó en 0 y ya no le permitió
meter otra velocidad. El auto se empezó a detener
a menos de kilómetro y medio de la meta mientras
Nelson Piquet pasaba junto a él para quitarle el
triunfo. Fue el último del tricampeón Piquet
en su vida de piloto y Mansell quedó clasificado
sexto pero aprendió a no volver a saludar a la gente
antes de tiempo.
3. 1967, GP de Italia: Jim Clark había dominado en
Lotus-Ford la carrera de Monza desde las primeras vueltas
pero un pinchazo en la vuelta 13 lo mandó a los fosos
a cambiar una rueda y perdió una vuelta. Esto, en
Monza que es un circuito de cortarse el aire con otros pilotos,
es letal para un piloto pero Jim se pegó al grupo
delantero, los pasó y se sacudió el corte
de aire para que no lo pudieran seguir y procedió
a recuperar su vuelta. En la vuelta 65 de 68 Clark estaba
de líder nuevamente pero en la última vuelta
con dos segundos de ventaja su auto empezó a toser
y en Lesmo lo pasaron Surtees y Brabham para dejarlo en
tercero a 23 segundos de distancia al recibir la de cuadros.
El escocés volador llegó a los fosos, se bajó
del Lotus y le dijo a Colin Chapman “ojalá
le hubieras puesto suficiente gasolina” y dejó
al dueño del equipo verdamarillo sin habla durante
incontables minutos.
4. 1974, GP de Argentina: Carlos Reutemann, ídolo
local, domina en su Brabham-Ford la carrera desde sus primeras
vueltas y para la vuelta 36, de 53, tiene más de
medio minuto de ventaja sobre su más cercano perseguidor,
Dennis Hulme en McLaren. Pronto empieza a bajar el ritmo
cuando la toma de aire se zafa y deja entrar más
aire, lo cual le hace consumir más gasolina y luego
una cable de las bujías se suelta dejando el auto
en 7 cilindros (era V8). Dennis le recorta ventaja y en
la vuelta 52 lo alcanza y luego, mientras el Brabham se
va deteniendo, lo pasan otros 5 pilotos para dejarlo séptimo,
sin puntos y llorando a un lado de la llanta trasera del
auto, igual que 100,000 aficionados en las tribunas.
5. 1982, GP de Mónaco: En esta se rompieron no uno
sino varios corazones. Faltando tres vueltas para el final
de la carrera de 78 vueltas, Alain Prost en un Renault turbo
iba ganando pero bajo el ataque de Ricardo Patrese en un
Brabham-Ford. Había empezado a llovizna unas cuantas
vueltas antes pero nadie se había detenido a cambiar
llantas, demasiado cerca del final para hacerlo, y cuando
Prost pasó a Derek Daly para ponerlo entre él
y Patrese, algo falló en su auto, quizás como
consecuencia de haber rebasado antes a Elio de Angelis con
un ligero toque entre ambos, y Prost terminó en la
barrera cuando le faltaban 7 kilómetros para ganar
la carrera que dominaba desde la vuelta 15. Patrese tomó
la punta y completó la vuelta 76 como líder
pero perdió el auto en la resbalosa zona de la antigua
estación de trenes y su auto quedó varado
en la banqueta. Tomó entonces la punta Didier Pironi
en el Ferrari turbo quien pasó la meta en la vuelta
77 pero hacía señales desesperadas hacia sus
fosos, y el auto se iba quedando hasta que se paró
en el túnel, a menos de 2 kilómetros de la
meta con un problema eléctrico. Ahora el líder
era Andrea de Cesaris que seguía a Pironi a media
vuelta, pero su Alfa Romeo se empezó a quedar sin
combustible y se detuvo metros antes del Ferrari, sin gasolina.
Sigue Daly pero este había tocado con la caja la
barrera en un trompo unas vueltas antes y su transmisión
se estaba quedando sin aceite por lo que tampoco iba a completar
la vuelta. Parece que nadie quiere ganar pero Patrese, que
estaba en un sitio peligroso, había sido empujado
por los comisarios de pista, aprovechando la bajada para
echar a andar el auto y pasó a todos los que le habían
precedido para cruzar la meta, único con 76 vueltas,
y ganar, aunque tardaron casi cinco minutos en convencerlo
de que realmente había obtenido su primera victoria.
Pironi fue segundo, Andrea tercero, Daly sexto y Prost séptimo.
6. 1999, Indy 500: Robby Gordon hace una estrategia arriesgada
en su auto del equipo Menard, con el cual va a correr solamente
esta fecha del campeonato y ahorra combustible para poder
llegar al final con una parada más larga que sus
rivales. Los cálculos del equipo le dicen que puede
llegar pero solamente si no fuerza el motor en exceso, lo
cual es algo contrario al espíritu de Robby que solamente
sabe pasar a los autos que van adelante sin importar si
están rezagados o no. Es el único piloto de
CART en la carrera y está demostrando que pude más
que toda la IRL junta, lo cual es un aliciente extra. Cruza
la meta en la vuelta 198 con más de 10 segundos de
ventaja sobre el sueco Kenny Brack, el campeón 1998
de la IRL, pero en la tercera curva su motor empieza a toser
y Robby sabe que tiene que parar por unos cuantos litros.
Entra a los fosos en la vuelta 199, recibe dos galones más
y sale pero la carrera está perdida y Robby acaba
tercero detrás de Brack y Jeff Ward, y nunca más
volverá a estar tan cerca de la gloria. Ahora corre
en NASCAR y sus tiempos de monoplazas parecen haber quedado
atrás aunque haga la peregrinación anual a
Indy a buscar revertir el resultado de 1999.
7. 1995, GP de Italia: Gerhard Berger y Jean Alesi defiende
a la Scuderia Ferrari en casa y han programado su estrategia
de tal forma que Berger toma la punta en la vuelta 14 y
cuando se detiene en los fosos Jean está ahí
para tomar la punta y se encaminan a un 1-2 para los tifosi.
En la vuelta 32 la cámara del auto de Jean se suelta
y le pega al otro Ferrari rompiéndole la suspensión.
Bueno, al menos Jean va sin enemigo al frente y alejándose
de sus perseguidores, la victoria del Cavallino Rampante
parece asegurada. Faltan menos de 10 vueltas para el final
cuando en la vuelta 45 el auto de Jean empieza a echar humo
de una de las llantas traseras, se han fundido los baleros
y el francés de origen siciliano abandona cuando
tiene media vuelta de ventaja. El auto llega lentamente
a los fosos y cuando sale Jean del auto la ovación
dura minutos pero para el final de la carrera casi la mitad
del público ha abandonado la pista sin quedarse a
ver el triunfo de Johnny Herbert en Benetton.
8. 1988, GP de Italia: La temporada es perfecta para McLaren
hasta el momento, sus pilotos han ganado todas las carreras
del año (y ganaron todas las que quedan). Pero el
espíritu de Don Enzo Ferrari, muerto días
antes, está presente. Prost abandona tempraneramente
y aunque Senna va en punta lo vienen alcanzando los Ferrari
de Michele Alboreto y Gerhard Berger, viajando en tandem
y cortándose el aire para hacer el trabajo de equipo.
Quizás no les alcance el tiempo pues Senna ha cruzado
la meta en la vuelta 49 y solamente le faltan dos para obtener
la victoria, aunque está tratando de conservar combustible
después de su batalla inicial con Prost. Ahora el
brasileño alcanza al Williams de Jean Louis Schlesser
–el experto en rallies del desierto que ha substituido
a Nigel Mansell por única vez- pero en la entrada
a la chicana el Williams está en la parte de afuera
y resbala en la suciedad de la pista cuando Senna está
en la curva. La llanta trasera del McLaren es tocada por
la delantera del Williams y Senna es lanzado en el aire
con su auto para caer encima de los bordos en los cuales
el auto queda varado. Los Ferrari están adelante
en un instante, Berger al frente, y la erupción en
Monza es digna de un campeonato mundial. La única
carrera perdida por los de Woking en todo el año,
la única temporada perfecta de los tiempos modernos
ha quedado desechada, y no volverá a estar tan cerca.
El espíritu de Enzo ríe en el cielo, misión
cumplida.
9. 1999, US 500: Max Papis saborea su primer triunfo cuando
faltan menos de 5 vueltas para terminar la US 500 en el
óvalo de Michigan. Ha escogido una estrategia riesgosa
al parar antes que sus perseguidores en la última
tanda de recargas de combustible, pero ha dominado la carrera
desde el principio en su Reynard-Ford, y espera su primera
victoria en CART con el equipo Rahal. Los cálculos
de su equipo le dicen que tiene suficiente metanol para
200 vueltas y un poco más, pero hay tránsito
intenso y atrás de el libran una furiosa batalla
Tony Kanaan y Juan Pablo Montoya que se le acercan, lo cual
no puede permitir el italiano. Mantiene un segundo de ventaja
sobre el dueto que lo sigue y cruza la meta en la vuelta
199 recibiendo la bandera blanca que le indica que falta
una vuelta. El italiano piensa que llega sin problemas pero
en la tercera curva su auto simplemente se apaga y en un
instante lo han pasado Tony y Juan Pablo que completan la
cuarta curva y entran a la recta de meta separados por 32
milésimas de segundo. Max se ha quedado sin combustible
a 600 metros de la meta y en la clasificación final
está séptimo mientras Tony celebra esa primera
victoria que debió ser para él, además
del premio de un millón de dólares por ganar
la US 500 que engorda la cuenta bancaria de Tony y no la
suya.
10. 1993, Indy 500: Mario Andretti tenía ya 53 años
de edad y batallaba contra pilotos que podrían ser
sus hijos, de hecho tanto Mike como Jeff Andretti –sus
hijos- y John –su sobrino- arrancaron esta edición
de la Indy 500. Sabía que el retiro estaba cerca
y tenía un coequipero llamado Nigel Mansell, campeón
exiliado de Fórmula Uno, y se había preparado
como nunca para buscar su segunda victoria en Indianápolis,
la primera desde 1969. Desde la arrancada Mario tomó
la punta y aunque la perdía cuando entraba a cargar
gasolina en los fosos del equipo Newman-Haas Racing, para
la vuelta 150 tenía más del doble de vueltas
de líder que sus contrincantes. Una bandera amarilla
por un accidente cuando estaba por entrar a su penúltima
parada parecía favorecerlo pero los comisarios marcaron
los fosos con una “P” roja y Mario fue penalizado
con una parada extra por haber entrado a los fosos cuando
estaban cerrados. Eso lo retrasó y aunque no perdió
una vuelta ya nunca recuperó el ritmo que llevaba
y fue vencido por Emerson Fittipaldi y Nigel entre otros,
terminando sexto a menos de siete segundos del bicampeón
brasileño. Ya nunca más ganaría Indy.
Y Fittipaldi adelantaría a Mansell en la última
rearrancada para ganar cuando el león británico
ya también olía la victoria.
11. 2001, GP de España: Mala temporada para el bicampeón
mundial Mika Hakkinen de McLaren, que se rumoraba pensaba
en el retiro par disfrutar a su creciente familia. Muchos
decían que ya no tenía la velocidad para lidiar
con Michael Schumacher y llevaba apenas cuatro puntos en
la temporada tras cuatro carreras, pero ese día Mika
había demostrado que todavía era el gran campeón
de 1998-99. Calificó segundo y siguió a Schumacher
hasta la vuelta 22 cuando este se detuvo y él tomó
la punta y a su vez la cedió en la 27. En la 43 volvió
a encabezar la prueba y dio unas vueltas impresionantes
para salir antes que el alemán al parar en la vuelta
50, de 65. Ahora estaba adelante y los esfuerzos del alemán
fueron infructuosos, Mika se alejaba constante y seguro,
como en sus mejores tiempos. La vuelta 64 la pasó
con más de ocho segundos de ventaja y el alemán
afectado con vibración en sus llantas que había
destrozado intentando alcanzar a Mika. Pero faltando tres
cuartos de kilómetro para la meta, el embrague del
McLaren de Mika estalló por una fuga de líquido
hidráulico, y el auto solamente recorrió una
centena de metros antes de detenerse justo al momento que
Schumacher lo adelantaba para ganar. Y el finlandés
decidió que después de todo ya estaba cansado
y a los pocos días anunció su retiro temporal
que se volvió permanente en la F1.
12. 1996, Laguna Seca: Bryan Herta era considerado el maestro
de Laguna Seca y en esta carrera compartía la primera
fila con Alex Zanardi, el nuevo piloto del equipo Ganassi
que venía de Europa a buscar el título de
novato del año en CART. Bryan tomó la punta
unas cuantas vueltas después de su primera parada
en los fosos rebasando a Zanardi en la vuelta 43 en la segunda
curva en una maniobra maestra. Posteriormente se dedicó
a conservar la punta ante los ataques del italiano, mostrando
quien era el maestro. Zanardi lo había presionado
en las últimas 20 vueltas pero no había forma
de hacerle cometer un error, Bryan sabía que esta
era su pista y no le iba a ceder el sitio a nadie. La carrera
era a 83 vueltas y los dos pilotos cruzaron la meta en la
82 separados por menos de un segundo y Bryan empezaba a
saborear la victoria, su primera en CART. Se acercaban al
llamado “sacacorchos” y Bryan tomó su
línea habitual y cuando volteó por el espejo
para buscar a Zanardi simplemente dejó de verlo.
El italiano había tomado una línea por fuera,
brincando los bordos y usando la tierra para rebasarlo.
La sorpresa fue mayúscula, nadie podía hacer
eso, pero Bryan lo sufrió en carne propia y quedó
segundo después de haber dominado la carrera. Lo
peor vendría después, burlas de compañeros,
y ser el punto de referencia de Zanardi, todos lo conocían
por el italiano no por sus méritos, y aunque ganaría
posteriormente en esta misma pista dejando segundo a Zanardi,
su estrella murió en el sacacorchos en Laguna Seca
ese año.
© CEJV/SHRAC 2003
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