Murió el Asociado Manuel Sanabria
Octubre 30 de 2008
Por Carlos Jalife
Fotos MSanabria/CEJV

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Manuel Sanabria fue un piloto de fines de los años 60 y principios de los 70. Uno más de los combatientes de la poderosa armada de Mustang que hizo suyas las clase superiores del automovilismo nacional, tanto en la TN (Turismo Nacional, o sea, sin modificaciones) como las TLM (Turismo Libremente Modificado, o sea, con todo lo que tu cartera aguante).

Fue un piloto entregado, de eso que tenemos muchos en la pista arriesgando el físico hasta el límite de sus habilidades y aunque no todos son Memo Rojas o Juan Carlos Bolaños, en un buen día le dan la pelea a cualquiera y Manuel era uno de esos, de los que integran la parrilla y terminan el día con la frente en alto tras una buena batalla librada en el asfalto, listo para propulsar el automovilismo con su esfuerzo y pasión hasta donde el amateurismo llegue (y lo digo en el sentido de ser un competidor no profesional, no pagado, nunca en el sentido que ha adquirido últimamente medio peyorativo como de impreparado).
Se retiró en los 70s, como muchos otros, víctima de una devaluación negada hasta la saciedad por los políticos, pero siguió siendo aficionado hasta el final, mismo que llegó de improviso cuando una pastilla le causó un paro de vías respiratorias tras haber manejado a su casa en Acapulco y nos dijo adiós de súbito en los días finales de octubre de 2008.

Y queda el recuerdo de uno de nuestros asociados de la Delegación Cuernavaca y de su hijo del mismo nombre –quien pronto será inducido cuando se formalice la misma, a la cual ya no llegó Manuel–; seguro que ahora estará allá arriba platicando con Pedro y con Ricardo y formándose en la parrilla listo para competir. Descanse en paz Manuel, uno de esos pilotos que aportaron su granito de arena para engrandecer nuestro automovilismo. Y en particular, gracias por la espléndida foto de la arrancada del GP de México de 1970 que me permitiste usar en el libro de Los Hermanos Rodríguez en la versión en inglés, estoy en deuda contigo.

© CEJV/SHRAC /2008