Evento 40Años de La Victoria de Pedro en Le Mans e Inducción en el RAC
Septiembre 27 de 2008
Por Carlos Eduardo Jalife Villalón
Fotos: CJ/Javier, Omar y Carlos A. Jalife

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El sábado 27 de septiembre la Scuderia Hermanos Rodríguez A. C conmemoró el 40º aniversario de la victoria de Pedro Rodríguez en Le Mans con un acto en las instalaciones del RAC en la Colonia del Valle en México, D.F., junto con la inducción de cinco nuevos miembros.

A las 11:00 horas empezaron a llegar los asistentes para registrarse y tomar sus programas y cuando la mesa directiva estuvo completa -40 minutos más tarde- se dio comienzo al programa conducido por Carlos jalife, el secretario general, como MC; la bienvenida corrió por parte del presidente Chacho Medina ante un salón lleno a rebosar con más de 100 asistentes. Tras explicar los pormenores del acto se dio paso, fuera de programa a la presentación del trofeo que ganó pedro en 1968, ahora propiedad de la pilota de NASCAR México, Estefanía Reyes, quien posó para los medios asistentes con el mismo y explicó como había llegado a sus manos esta valiosa reliquia del deporte motor, quizás el trofeo más importante de un mexicano a nivel internacional.

Siguió luego la exhibición de la película de Pedro en Le Mans en 1968, cortesía de Ferodo, la cual sufrió algunos desperfectos que fueron subsanados mientras los asistentes recibían explicaciones de la mesa directiva acerca de detalles de esa carrera.

Después vinieron las inducciones empezando con los tres pilotos del famoso equipo RVR multicampeón de México de los años 70. El primero en tomar la palestra fue Guillermo Rojas B., quien fue apadrinado por su hijo Memo Rojas, quien le entrego la charolita plateada que lo acredita como miembros de número en un acto muy emotivo que incluso estremeció al usualmente sereno piloto multicampeón de México y provocó muchos abrazos y un reconocimiento de parte de Memo, quien dijo: “Todo lo que sé de autos se lo debo a mi padre” y se fundió en un abrazo con su progenitor.

El siguiente inducido fue el mítico Héctor Alonso Rebaque, el único mexicano que corrió en F1 y vive para contarlo. Su padrino fue su jefe de equipo y coordinador en el mismo Team Rebaque F1, Chacho Medina, y la presentación sobró, todos sabían quien era Héctor y su figura como uno de los “cuatro grandes del automovilismo nacional”, título que le adjudico Carlos. Rebaque agradeció la introducción y se disculpó porque había tomado tanto tiempo, originalmente iba a ser miembro desde 2002, pero por muchas razones se había dejado pasar la oportunidad.

Luego vino el tercero de los ases del RVR, Freddy Van Beuren Martínez (o IV), quien fue apadrinado por uno de sus amigos y rivales de aquellos tiempos, Raúl Pérez Gama. Freddy también había dejado pasar algún tiempo antes de poder ser inducido y como la idea era tener a los tres miembros del RVR juntos, la oportunidad no se había dado y agradeció que finalmente los hubieran juntado, la primera vez que se encontraban para un acto público en más de una década, lo cual aplaudió la gente al estar consciente de la importancia de esta reunión.

A continuación vino la inducción del único campeón mundial mexicano de karts, Carlos ‘Chacho’ Pruneda, quien fue la única mujer avalado por Juan Carlos Bolaños, otro de los grades pilotos de esos tiempos y agradeció el recuerdo del hecho casi desconocido en la historia del deporte motor, acaecido en la Semana Internacional de la velocidad en Bahamas en 1960 en la clase Stock A, el cual platicó frente al público asistente.

Finalmente le tocó el turno al diseñador de coches Daniel Mastretta, quien fue presentado por Ignacio Segura, ex presidente de la Scuderia. Daniel enfocó su atención al hecho de que la Scuderia homenajea a gente de la comunidad automovilística, no solamente pilotos o rodriguistas, y explicó algunos pormenores de su nuevo auto MTX que saldrá a la venta en 2009 como un superdeportito de producción limitada.

Al terminar, los cinco inducidos se juntaron al frente para una foto y Carlos anunció que era la hora de que memo, recién coronado campeón de la Grand Am, firmara algunos postres que había proporcionado la Escudería Telmex, y Carlos también dedicó ejemplares de su obra Los Hermanos Rodríguez, junto a Conchita Rodríguez. A la par se sirvieron bocadillos y bebidas para que los presentes pudieran continuar la convivencia y solicitud de autógrafos, en la cual los miembros del RVR fueron particularmente solicitados; la plática posterior se prolongó hasta pasadas las 14:00 horas y muchos asistentes se fueron en grupos a comer con una gran sonrisa en la cara.

© CEJV/SHRAC/2008