Ruedas y Volante


La gran difusión que realizaban los periódicos El Imparcial ó El Universal cuando empezaron a disputarse las primeras competencias automovilísticas en las carreteras de este país, fue determinante para el desarrollo de estas competencias, que realmente buscaban la venta de estos vehículos de combustión interna, de aquellos que tienen mayor resistencia y velocidad en la competencia, y así solicitar su compra por catálogo a la Unión Americana.

Las carreras iniciaron en esta ciudad a partir del año 1902, donde se reunían dos ó más competidores, para llevar a cabo estas competencias que se hacían de esta ciudad capital a alguno de los estados más cercanos y donde terminaban en tertulias en medio de una gran comilona.

Pero las competencias no sólo se hacían entre vehículos, también entre camiones de pasajeros y motocicletas, para despertar gran interés a los habitantes de esta ciudad que poco a poco empezaban a construir esta gran metrópoli. Pero los eventos que más llamaron la atención, fueron las carreras en las carreteras federales, aunque aquí en México ya se veían en el circuito del Bosque de Chapultepec, donde realmente había buenos eventos y la gente acudía en gran número hasta caer muchas veces en las charlotadas, competencias que dejaban mucho que desear.

A partir de 1909 se realizó por primera vez las carreras México-Puebla, evento que tradicionalmente siempre se efectuó en el mes de diciembre, justo el día 24 y 25, para que en 1911, los participantes fueron divididos en tres categorías para recorrer una distancia de 320 kilómetros sobre la carretera federal. Ahora era ir a Puebla y regresar al siguiente día al lugar de partida, para salir por Texcoco, Calpulalpan, San Martín y llegar a Puebla y un día después se regresaba a esta ciudad.


Miles de aficionados se daban cita al lugar de salida elegantemente vestidas. La mayoría de ocasiones era una salida en falso desde las instalaciones del periódico El Imparcial, y se volvían a ordenar en determinado kilómetro afuera de la ciudad para llevar a cabo una re-arrancada. Las largas tribunas instaladas, se llenaban por miles de espectadores para escuchar las melodías que entonaba la mayoría de las veces la Banda Militar.


Pero los participantes no corrían por amor a la camiseta, recibían premios económicos, en metálico y contingencias, que partían desde la entrega de la Copa de Plata y la medalla de oro, para el vencedor absoluto, mientras que la entrega era de 500, 300, 100 y 50 pesos, además del juego de llantas.

Aunque en esta ciudad era el único evento automovilístico, en la ciudad de Saltillo, Coahuila, así como en Guadalajara, Jalisco, también programaban sus eventos, para que en el año se realizarán mínimo tres competencias, donde ya destacaban los autos: Peerless, Protos, Fiat, Buick, Delahaye, Lancia, Chalmers, Harry Shultz, Renault y Studebaker, entre otros y desde luego las llantas del momento eran Continental.

Sin embargo pese a los esfuerzos del periódico El Imparcial, este evento no se pudo llevar a cabo un año después por la falta de organizadores, para quedar en el olvido, fue hasta el 18 de septiembre de 1927, cuando otro medio informativo, la revista El Automóvil en México, organizó la Carrera México -Puebla, donde hubo todo un record de 35 inscritos, divididos en seis diferentes categorías, las que hicieron un recorrido de 145 kilómetros de longitud.

En esta ocasión Chrysler aportó un contingente de ocho participantes, los que hicieron un tiempo muy parejo, y el jurado le adjudicó a esta marca estadounidense un magnífico premio por su participación; mientras que los resultados del evento aquí los tiene por cartegorías: "A": 1.- Pablo Rodríguez, Essex, 1:36.15. Categoría "B": 1.- Julio Canales, Star 6, 1:36.29. Categoría "C": 1.- José Estrada Menocal, Buick, 1:21.2. categoría "D": 1.- Luis G. Armenta, Paige, 1:20.07. Categoría "E": Miguel Elias Abed, Stutz, 1:15.31 (Nuevo Record). Categoría "F": 1.- Rudolf Seidel, Studebaker, 1:19.20.

Un año más tarde se realizó la segunda edición consecutiva de este evento, con la intervención de 19 coches, donde José Muñoz Zapata, en un Chrysler, cronometró para los 145 kilómetros, un tiempo de 1:12.23 para mejorar la marca del señor Abed del año anterior, que fue de 1:15.31, dentro de la categoría "D"; mientras que en el resto de las categorías, los resultados fueron los siguientes: Categoría "B": 1.- Celestino Estrada, Plymouth, 1:26.10. Categoría "C": 1.- Pancho Knigth, Graham Paige, 1:18.19.3/5Categoría "E" José Estrada Menocal, Chandler, 1:20.41.

En 1929, no se realizó la carrera México-Puebla, por los accidentes que ocurrieron un año antes, pero en 1930, se corrió la tercera carrera, el 27 de abril con 22 participantes en cuatro diferentes categorías, pero será en la siguiente columna cuando les platique un poco de cómo siguieron estas competencias.

 

Hasta la próxima!!!

Su amigo
DABET MORALES

 

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