En mi columna 98, del año pasado, hablaba de un presidente débil y manipulado por los fabricantes, que vendría a significar la muerte de los equipos independientes, pero ahora  que la F1 está en una guerra de FOTA vs. FIA, veo que el otro extremo, un dictador que a toda costa imponga sus ideas, tampoco es el camino para la máxima categoría (ni para un país, digamos). La FIA , que bajo la dirección de Max Mosley y Bernie Ecclestone (el Vicepresidente de asuntos comerciales antes de comprar los derechos de la categoría por 100 años y decidir que no podía ser juez y parte) alejó a los constructores independientes para traer a las grandes marcas y hacer una profesionalización total del deporte motor en su máximo escalón, pero ahora, al pasar los años y subir los costos, ya sólo unos cuantos pueden competir y los equipos independientes han muerto en su mayoría y los de las grandes firmas también se van, como demuestran los casos de Super Aguri y Honda, respectivamente, en el último año. Entonces, ahora quieren de regreso a los  independientes, porque, además, las grandes firmas ya reclaman una mayor parte del pastel. Para ello imponen un draconiano recorte presupuestal y si nos les gusta, retan a los de la FOTA a formar su propia serie.
El viernes pasado, ‘Mad Max’ (así le dicen, publica sus 13 equipos aceptados a la F1 en 11020 y pone a cinco de la FOTA como provisionales y les da plazo de una semana (el viernes 19) para que retiren sus inscripciones condicionadas o no corren. Estos cinco (Toyota, BMW, McLaren, Brawn GP y Renault), son apoyados de inmediato por Ferrari, Red Bull Racing y Toro Rosso, quienes dicen que ellos no corren tampoco, aunque la FIA insista en que tiene contrato hasta 2012 y Bernie amenace con demandarlos, por lo que de los 12 les quedan solamente 5. Estos son Williams y Force India, los renegados de la FOTA, más los tres nuevos, USF1, Campos Racing y Manor F1. O sea, que la FIA nos dice que para la F1 en 2010 tendremos como campeón a Williams con 16 carreras ganadas, mientras Force India queda segundo y finalmente obtiene puntos. Mal presagio, ¿no?
Pero veamos al resto de sus equipos, con los que quieren suplir a ocho competidores que han ganado carreras y peleado campeonatos (excepto Toyota, que no ha ganado todavía). USF1, es un equipo con sede en EUA, que tiene a un ingeniero que trabajó en Ligier hace 15 años, como director técnico y le da consultoría a equipos de NASCAR, o sea, de risa, el hombre lleva como dos décadas de atraso tecnológico frente a cualquier ingeniero junior de McLaren, por decir uno. Lo dirige Peter Windor, quien escribe en F1 Racing y sabe mucho, pero si fuera por saber, Alan Henry, Doug Nye y Nigel Roebuck ya tendrían equipos también. Y luego quieren de pilotos a Danica (ja, ja, ja) y a un Andretti o Rahal (mientras no sean Michael y Bobby, todo va bien). Eso es la gran esperanza gringa. La verdad, yo prefería a Alex Gurney, hijo de Dan, y a Derek Hill, hijo de Phil, que tiene más experiencia en circuitos y monoplazas a la europea, pero esos nombres no están en el candelero aunque hayan sido los dos gringos más exitoso en la historia de la F1.
El segundo equipo es el Campos Racing, de Adrián Campos, el ex F1 español, que ahora tiene al equipo corriendo en la F3 de su país y su hijo es principal piloto de su escuadra. También atiende al equipo A1GP de México (sí, el fracaso ese que tanta pena nos da excepto cuando abren un día la cartera y permiten que compren refacciones nuevas y el auto aguanta la carrera) y al Barwa Addax de GP2 (que antes era el Campos-Barwa) en sus talleres en Valencia. El nivel lo tienen, para clases menores, pero dar el brinco de GP2 a F1 es un salto de presupuesto como de 12 veces y tecnológicamente es como ir de dos a tres dimensiones. Ellos esperan tener un chasis hecho por Dallara, lo cual ayuda, pues la fábrica italiana ya ha competido en F1 antes (Scuderia Italia, por ejemplo, y últimamente el proyecto Midlands fue asesorado por ellos). Y luego Campos dice que quiere a Robert Merhi, otro español de F3 y F Renault como piloto y que Sergio Pérez está entre los probables, es como decir que está fumando algún producto verde sin filtro. Y aunque mucho se rumora que hay una conexión mexicana, esta ha sido desmentida varias veces por Adrián y por Telmex.
El tercer equipo seleccionado por Max es el Manor Motorsport, de John Booth, equipo bueno de F3 Británica –no el mejor que es Carlin– y ahora brinca a la F1 con asesoría de Nick Wirth, el ex dueño de Simtek (aquellos autos blancos en los que se mató Roland Ratzenberger), quien además de nunca haber tenido éxito, es otro que supone que sus ideas son las mejores del mundo. Nick dice que no necesita un túnel de viento para desarrollar el auto, que a pura computadora él sabe si es bueno o no  (usando CFD o Dinámica de Fluidos por Computadora, y MDS, o Simulación Dinámica Multicorporal) y que por eso puede controlar los costos, o sea, mucho bla, bla, bla, pero en la práctica sólo puede hablar del proyecto del prototipo Acura Rx02b de la serie ALMS, para el cual desarrolló un simulador que permite evaluar los cambios sin probarlos en pista, lo cual es más barato, pero no necesariamente lo ideal. Y luego dice el dueño Booth que esperan pelear los primeros 10 sitios en la tabla, no ir por las victorias en su primer año. ¿Así o más soñador?
Y estos son los aceptados, los que usarán el motor Cosworth y cajas y piezas genéricas, tipo Champ Car y aceptan el tope presupuestal (no que tengan mucha opción); la selección es muy interesante, un equipo gringo para atraer el mercado más grande del mundo (de los que importan, no en cantidad sino en calidad); un equipo español para aprovechar la explosión que ha habido de automovilismo en España gracias a Fernando Alonso; y un equipo inglés decente con alguno de los antiguos cuates de Max como asesor. Buen balance, lástima que las oportunidades de cualquiera de ellos son nulas aún frente a Force India..
Pero entre los otros nueve que no fueron aceptados (de los 12 nuevos evaluados) hay otras joyas... muy en bruto. Consideremos por ejemplo al equipo de F3, LiteSpeed, que ahora se llamará Lotus pues David Hunt, el hermano de James, les vendió los derechos, lo cual tiene a la familia Chapman furiosa y analizan la posibilidad de ir a tribunales para impedir semejante barbaridad. Pues LiteSpeed tiene como consultor a Mike Gascoyne, el ex diseñador de Jordan, Toyota, Renault, y Force India, quien hace autos buenos, si hay billetes para desarrollarlos y pulirlos, lo cual va contra el tope de la nueva F1 de Max y Bernie. El LiteSpeed es el peor equipo de la F3 Británica, tienen al campeón de la F3GB clase B del 2008 y no le dan buen servicio, y su otro auto queda en el sitio final en la última carrera que recuerdo hace un par de semanas. Credenciales impecables, no cabe duda, y el presupuesto para ir de F3 a F1 es como 50 veces mayor, nada más para que vean como van a trabajar sus vendedores de espacios comerciales.
Otro equipo nuevo es el Formtech, que son unos fabricantes alemanes de herramienta industrial y robots y no sé que más, que compraron los restos del Super Aguri y metieron una inscripción bajo el nombre de Brabham, con lo que ya Sir Jack Brabham y familia (David acaba de ganar Le Mans el domingo) ya les dijeron que o desisten o los demandan. Bueno, estos germanos roba nombres, creen que entra  ala F1 son como preparar enchiladas suizas (tipo Sauber) y nunca han construido un auto de carreras, así que verán que son grandes contendientes… al último sitio.

Luego tenemos al Epsilon Euskadi, dirigido por Joan Viladeprat, el catalán que estuvo en Benetton cuando fueron campeones mundiales y en general hizo una buena carrera en F1 como director de equipo antes de irse a apelar al nacionalismo vasco (es lo de ‘Euzkadi’). Ellos tienen más experiencia, de hecho tiene prototipos para Le Mans, aunque no les hay ido muy bien, y sus equipos de WSR, F3, FRenault y otras series han tenido victorias y detalles interesantes, pero están lejos de su nivel por mucho. ¿No han podido en Le Mans y quieren brincarle a la F1, que cuesta 10 veces más? No suena lógico, pero ellos hasta han ofrecido su base en Guipúzcoa a la gente del USF1 para que no tengan que cruzar el Atlántico cada quincena. Mucho compañerismo, pero así no se gana en la F1, hasta donde recuerdo. Y hablan de pilotos españoles como Villa, Martínez, Gené, incluso Pedro de la Rosa como probables para sus asientos.