Realmente no tenía ganas de que esto ocurriera, pues siempre que alguien hace trampas en el deporte, el que queda afectado es el propio deporte, no tanto el jugador o equipo, pero finalmente sucedió y la FIA tomó una decisión, a través de su Consejo Mundial del deporte Motor (WMSC), muy dura respecto al asunto del espionaje de McLaren contra Ferrari.

La sanción fue de 100 millones de dólares de multa, además de expulsarlos del Campeonato de Constructores 2007, descontarles los puntos que tienen hasta el momento y en diciembre se analizará si también les impiden contar con puntos para el 2008 como equipo, aunque podrían presentar sus dos autos compitiendo por puntos para sus pilotos.

El presupuesto de McLaren es de unos 350-400 millones de dólares al año, por lo cual pagar 100 les afecta, pero habrá que exprimir un poco a los patrocinadores para sacar algo y seguramente en 2008 no cambiarán los Mercedes de todos los altos ejecutivos para compensar un poco los gastos. Ese no es le problema, sino que al no tener puntos en la Copa de Constructores no les entra la participación del dinero que se reparten los equipos de F1 de acuerdo al resultado del año, y por ello sufrirán un quebranto de entre 250 y 300 millones más, o sea el bono que les ha permitido endeudarse para construir su centro de tecnología y cosas por el estilo. Ni modo, el nuevo túnel de viento de fluidos dinámicos tendrá que esperar.

Pero lo peor de todo es que los catalogaron como tramposos y eso no se quita ni pagando mil millones en multas, lo cual es un triste legado para Ron Dennos el dueño y formador del proyecto desde 1980 cuando tomó las riendas de manos de Teddy Mayer, uno de los fundadores originales de McLaren con Bruce McLaren en los años 60, además de continuarlo tras la muerte del piloto neocelandés en 1970.

Pero la verdad, desde el principio los argumentos de Ron acerca de que no se habían beneficiado del trabajo de Ferrari eran muy endebles, es como si me encuentran el botín de un robo en mi casa y yo arguyo como defensa legal que yo no lo robé y que nunca lo usé. La policía de todos modos me ‘entamba’ y luego veremos que tanto me dan de cárcel, Y la sentencia para McLaren fue alta. Ahora, que hay muchos que dicen que podría apelar, pero evidentemente la FIA no le gusta que apelen este tipo de decisiones y por eso en diciembre analizará si los corre también en el 2008. Si apelan y se ponen tontamente legaloides, en diciembre los corren de la Copa de Constructores para 2008 y mientras son peras y son manzanas, les quitan su dinero otro año, así que el mensaje es claro: aguanten vara como los hombres y no lloren como Ron Dennis en Monza.

Ahora, yo no soy Ferrarista, y me choca también eso de los baños de pureza que se da la escuadra italiana con lo de la justicia. Ellos iniciaron la temporada con un auto ilegal en Australia, el del piso flexible, pero McLaren pidió una clarificación al reglamento, lo cual fue un indicio muy claro de que los de Woking sabían que algún hoyo en el reglamento habían encontrado los de Maranello. Y así empezaron las sospechas. Lo cierto es que todos hacen trampa hasta que los cachan y entonces dicen que habían sido creativos para interpretar las reglas, lo cual en cierta forma es válido. Pero de eso a que un inglés que trabaja en Ferrari te pase los planos del nuevo auto de F1 por despecho al no haber sido nombrado jefe del mismo, hay mucha distancia. Yo creo que esto va a exacerbar el nacionalismo en Ferrari y no vuelven a contratar británicos aunque caminen sobre el agua. Es más ni Hamilton tendría cabida en la firma del Cavallino Rampante. Ojalá Nigel Stepney y el tercero de a bordo de McLaren y contacto de Nigel en Woking, Mike Coughlan no vuelvan a trabajar, punto, han desacreditado el deporte de forma brutal. Y lástima por ambos que solían ser buenos tipos hasta que el credo de ganar a toda costa se hizo más importante para ellos que aquel de ganar limpiamente o perder con honor.

Y es más grave que McLaren diga que tanto Pedro de la Rosa como Fernando Alonso, sus pilotos, actuaron a título personal. Eso es una falta de hombría de los responsables del equipo, pues ambos volantes pedían los resultados a sus ingenieros, sin saber exactamente de donde los sacaban, aunque sospechando que había alguna filtración en Ferrari. Pedro y Fernando son dos pilotos que aprovechan todo lo que les den, sean distribuciones de peso en el monoplaza o estrategia de paradas en carrera, y no son ellos los que tienen que cerciorarse de que la información sea legal, sino los mismos que se las proporcionan. Pero eso demuestra que en McLaren la ética que existió hasta que Jo Ramírez estuvo en el equipo, despareció con él. Y ahora pagan el precio de no haber encontrado a un tipo como el mexicano, que era también la conciencia del equipo. La memoria de Bruce McLaren no merecía esto.
© CEJV/SHRAC 2007