Ya bájenle con sus niños héroes chafas y enfóquense a los ganadores

Yes we can be heroes for just one day"
David Bowie

La verdad los medios de México con muy contadas y no siempre honrosas excepciones son una porquería. Ahora todos se están subiendo al caballo de los adolescentes, que para nada son niños, de la selección Sub-17 que ganó el mundial de panbol en su categoría, la más chica de todas las que reciben reconocimiento, y las más chafita también.

Ques si los nuevos ‘Niños Héroes’, que si ya vamos a ser potencia, que si es algo nunca antes visto, y miles de mamarrachadas más han escrito los afectados por el cerebro que siguen con fiereza el panbol. Y todos los políticos se van en la cargada y les hacen homenajes gastándose el dinero de nuestros impuestos.

Hay que dejar en claro que estos chapines no han hecho gran cosa por México, no han ayudado a disminuir la deuda, acabar con la corrupción o algo así, simplemente probaron ser mejores que otros chavitos de su edad en un deporte en el que estamos acostumbrados a ser unos fracasados, y por eso se les celebra. Pero no somos campeones de nada, el único campeón mundial es Brasil que tiene el mejor equipo del planeta en cuanto al deporte de las patadas, el resto es atole con el dedo.

Y todos se van en la finta de los chavitos, quienes por cierto ya están fuera de la esuela en su mayoría, y si una lesión les rompe el camino antes de volverse profesionales (no se los deseo), van a acabar de cargadores en la central de abasto. Les aconsejo que mejor sigan dándole a los libros, no vaya a ser que queden como los otros campeones mundiales, los de beisbol de Williamsport en 1957 y en algún otro año, que llevan vidas comunes y corrientes sin monumentos ni estatuas.

En fin, eso pasa cuando se habla de un deporte tan manipulado como el circo romano de hace 2 milenios, aunque sin tantos muertos.

Y a los que les parezca exagerado el regaño para los panboleros, ya veremos muy pronto el fracaso estrepitoso de los nacionales en el próximo mundial grande o chiquito en el que se compita, si es que se califica. Ese es su nivel y esto de la Sub-17 fue un garbanzo de a libra, de los cuales no hay muchos, como lo demostró Hugo hace años. Mejor vamos enfocándonos en deportes en los que somos triunfadores y no en una bola de fracasados por los siglos de los siglos.

Y mientras los chavitos recibían sus 15 minutos de fama (Warhol dixit), por otros lados verdaderos deportistas mexicanos que no nos cuestan dinero de impuestos, se partían en la pista para ganar y obtener títulos. Casualmente este fin de semana pasado Luis Díaz ganó por tercera vez en el año en la serie Grand Am, ahora en el Virginia Internacional Raceway, y mantuvo vivas sus muy tenues esperanzas de coronarse en la categoría de prototipos, lo que se decidirá en México en el Autódromo Hermanos Rodríguez el 5 de noviembre próximo, cuando enfrente con Scortt Pruett a sus rivales Max Angelelli y Wayne Taylor, quienes le sacan 32 puntos. Una victoria cuenta 35 puntos así que el ‘Chapulín’ necesita ganar y que la dupla italosudafricana quedé atrás del sitio 28 en su clase, pero el problema es que quizás no haya tantos prototipos en México, y eso podría ser el principal obstáculo para Luis.

 

Del otro lado del Atlántico, en Silverstone, Inglaterra, el buen Salvador Durán obtuvo el campeonato de F3 Británica clase B (para autos de modelo 2004 o anteriores), con el equipo P1 Racing, mismo que llevara a la corona en la misma clase al venezolano Ernesto Viso hace no muchas lunas. ‘Chava’, quien tiene 19 años, no recibió el tipo de propaganda que los adolescentes duchos en patadas, quizás porque el automovilismo no es visto como un deporte de masas, cuando lo ha sido durante muchos años, pero gracias a una política de evitar los grandes eventos masivos fue relegado por los regímenes priístas de la última parte del siglo XX. Y es uno de nuestros grandes deportes en cuanto a logros, lleno de títulos y victorias, no como los fracasos usuales de los panboleros que meritoriamente han sido conocidos como ratones verdes.

Claro que habría que pensar que si un panbolero tiene un mal día pues se pone a llorar y lo infiltran para que juegue a la semana siguiente. Si un piloto tiene un mal día, pues lo entierran a la semana siguiente. Cuestión de cojones, bien decía Hemingway que solamente hay tres deportes: automovilismo, toros y montañismo de alto nivel. El resto, son juegos, con pelota o sin pelota, con pelotas o sin ellas.
Total que a ‘Chava’ no lo ha invitado el presidente, no le han hecho homenajes por parte del gobernador de Morelos, ni nada de esas jaladas reservadas para panboleros que no fracasaron, como es su costumbre. Quizás deberíamos tener puros perdedores en otros deportes, para que así cuando ganen se les aprecie más. Pero de todos modos, aquí si apreciamos a los triunfadores de siempre, los pilotos mexicanos desde los años 50, y echamos a volar las campanas por el que se apunta como nuestro próximo representante en la Fórmula Uno si consigue mantener el paso en las siguientes categorías que participará, la F3 Británica o la Fórmula Mundial Renault, que sería el penúltimo paso antes de la F1, pues de ahí sigue la GP2. Y es buenos saber que la tradición de triunfo se mantiene viva. Ahora a ver si alguno de sus colegas en CART nos trae algo bueno en Australia o en México, pues este año en esa serie no hemos tenido grandes resultados como solían tenerse en años anteriores. Ya ‘Chava’ puso el ejemplo…

© CEJV/SHRAC 2005