Ahora que Danica Patrick parece ser la siguiente gran figura mediática en el automovilismo de Estados Unidos, convendría recordar algunas cosas.

Danica nunca ha hecho gran cosa como pilota (si la Real Academia ya acepta ‘árbitra’, nos adelantamos y aplicamos este uso). Viene de haber logrado un subcampeonato de Fórmula Ford hace varios años, pero lo que no se dice es que hubo un choque entre algunos de los favoritos y eso le permitió quedar se guinda en la Gran Final del festival en Brands Hatch, pero sin inquietar al ganador. Luego regresó a correr en este lado del Atlántico, pero nunca progresó mucho, no hay victorias de ella en la Fórmula Atlantic, tampoco en la IRL, pese a estar en uno de los grandes equipos en ambas series, el Rahal, del multicampeón Bobby.

¿De dónde viene la fama entonces? Pues de que fue líder unas cuantas vueltas en la Indy 500 más reciente, pero acabó en cuarto sitio y además es mujer. Lo que no recuerdan sus apologistas es que en Indy por un accidente que ella causó gracias a su impericia, quedaron eliminados otros pilotos, entre ellos Tomas Scheckter. Y no tenía oportunidad de ganar pues paró al final de una bandera amarilla y no le alcanzaba para llegar al final de las 500 Millas, así que eso de que iba ganando a pocas vueltas del final fue tan prefabricado como el liderato de Michel Jourdain II en la carrera de CART del 2002 en el Hermanos Rodríguez de México; en ambos casos, todos sabían que tenían que parar antes del final y por eso nadie los inquietó para quitarles la punta durante un buen rato.

Luego se habla mucho de su reciente Posición de Privilegio, pero habría que recordar que hace unos años, en 2001 en Kentucky, Sarah Fisher hizo lo mismo en la propia IRL, y hasta probó el McLaren de F1 antes del GP de Estados Unidos en la pista de Indy (mismo que se corría en septiembre en aquel entonces, no en el verano como ahora). Y Danica no pudo probar el BAR 007 porque la situación no era la adecuada (o sea, no tenía superlicencia ni oportunidad de conseguirla en tan poco tiempo y Honda no quiso arriesgar). Pero Sarah no tenía una relación personal con su jefe de equipo (Derrick Walker), como la que se rumora que sostiene Danica con Bobby, y ya que se le acabó el gas de los medios ahora corre en la NASCAR West, lo cual bien podría ser el destino de la diminuta pilota actualmente en el candelero.

Pero realmente lo que importa es que la demografía de Estados Unidos, y el mito de que su sociedad es el afamado ‘melting pot’ en donde todo es posible y todos son iguales, es lo que ha hecho que se vuelquen sobre Danica los periodistas y los publicistas. Digamos que la IRL no está en buena situación con los posibles abandonos de Toyota, Chevy y Honda (no sé que vayan a declarar esta semana mientras deshojan la margarita), y necesitan que sus tribunas se llenen, por lo cual necesitan una figura propia hecha en EU, y al ser mujer, es distinta, pues no hay una mujer destacada todavía. Como en EU les encanta mostrar que cualquiera puede lograr el sueño americano, ahora que acaben con Danica seguirá un negro (lo que mucho les molesta, pues ya se dicen ‘afro-no-sé-qué’), y luego un latino (lo que ellos llaman ‘hispano’ y nadie se molesta aquí), y luego vendrá algún discapacitado, y así hasta agotar la gama, pero se trata de un juego tonto porque para conducir un auto a más de 300 kilómetros por hora lo que cuenta es la habilidad, punto.

Pero en pos del mito de la igualdad, que no es tal, aunque se ha logrado hacer creer en ella con el argumento de que cualquier idiota puede ser presidente, ejemplificado ampliamente por GW Bush (y acá no cantamos mal las rancheras), hay que mostrar que una mujer puede llegar hasta donde sea, aunque no tenga los merecimientos, como es el caso de Danica, que es una pilota competente pero nunca ha sido ganadora. Y si volteamos abajo en la Atlantic está la inglesa Katharine Legge, que lleva tres triunfos este año, pero en la F3 británica tampoco fue la maravilla. La Legge maneja en serio y podría tener más futuro que la Patrick, excepto que no tiene un mecenas como Rahal, todavía.

Y en la comunidad de carreras, la atención desmedida a Danica ha provocado una reacción que encabezan los pilotos del Andretti-Green Racing, quienes han hablado contra ella pues no se merece la atención que tiene sin ganar. No se trata de envidia, se trata de que el mejor sea el que se lleve los reflectores, y en este caso el mejor es Dan Wheldon, y le sigue Tony Kanaan, y hay otros siete antes de Danica, pero a ella es a la que dan una línea sola para firmar autógrafos, mientras a los cuatro del AGR los agrupan juntos y eso ha provocado que se rehúsen a participar en las sesiones programadas por la IRL. Y Dan, líder del campeonato 2005, además de llevar la mayoría de las victorias en el año, ha hablado pero para ensalzar a Marco Andretti como el futuro estrella de EU., en lo cual tiene algo de razón, pues el chavo maneja en serio.

En fin, yo creo que todos somos iguales ante la ley, o ante Dios o ante los ojos de los demás, pero de eso a que todos tengamos las mismas habilidades hay un mundo de diferencia. Y por eso yo estoy escribiendo esto y tu lo estás leyendo, aunque los dos seamos igual de aficionados al automovilismo, pero tenemos habilidades distintas. ¡Viva la diferencia!

© CEJV/SHRAC 2005